LA fuNdA fEa
El último día que estuve en Pucelandia fui con Madre a comprar un Jamón Alcortingles. Sí, amigos, ya sé que todos estáis deseando una jugosa anécdota de la sección de dietéticos, pero no. El mayor incidente que ocurrió durante la transacción del Presunto fue la cola de un buen puñao de personas ávidas por comer ibéricos. Lo que soy yo, no creo que cate el que adquirimos, porque de aquí a que vuelva a casa por navidad Madre y Consorte habrán dado ya buena cuenta del mismo.
Mientras hacíamos tiempo antes de bajar al súper nos dimos un paseo por plantas y acabamos comprando una funda para el móvil. Por qué extraña razón mi funda es fea no puedo explicarlo del todo. Uno cuando compra suele comprar cosas bonitas, o, al menos, que le gusten. Mi funda es fea y me gusta más bien poco. Tiene unas llamas horrorosas y los colores no combinan. ¡Dios, qué fea es mi funda!
Esta mañana lunática he estado más bien poco sembrada. A pesar de que había quedado con Queta a las nueve y media para hacer papilla, no ha llegado hasta las diez, y servidora ha estado haciendo el paripé durante media hora en el laboratorio, aburridita, más bien. Después, mientras hacía las labores estaba espesita, pero sin mayor problema. A cosa de las tres y pico, polar en mano y con un pie fuera me he dado cuenta de que tenía que matar a los controles ¬¬
Cómo matar moscas sin prestar la más mínima atención. En la parra y sin mucho mirar he vaciado botella por botella en el cementerio. Y, lo que tiene no mirar, una de las botellas con papilla blandita ha escurrido, las moscas se han escapado (bien por ellas) y se me ha ido tanto la bola que se me ha caído el frasco-cementerio. Es algo estupendo como podréis imaginar, y además, para los no conocedores del tema, el éter huele regular. El éter con cadáveres de moscas huele horrible. Éter+cadáveres de moscas+papilla reblandecida tiene un matiz que ya sólo distinguimos los expertos. De manera aproximada, una persona normal diría sencillamente que huele a mierda. Así como si un nanobot se tirase un pedo a modo humo negro (sin drama, tranquilidad, lo sabemos, NO SON NANOBOTS)
Ensimismadita mientras limpiaba se me ha caído el otro cementerio. El de los novatillos. Por suerte éste estaba tan repletito de cadáveres que sólo se ha esparcido a modo salsa untosa y ha sido mucho más fácil de recoger.
Durante todo este tiempo lo único que he sido capaz de pensar es en la funda fea. Porque si mi funda fea hubiera estado puesta, el móvil no se hubiera empapado del mejunje y ahora no olería a lo que huele. No debería darle tanta importancia a las apariencias...
Mientras hacíamos tiempo antes de bajar al súper nos dimos un paseo por plantas y acabamos comprando una funda para el móvil. Por qué extraña razón mi funda es fea no puedo explicarlo del todo. Uno cuando compra suele comprar cosas bonitas, o, al menos, que le gusten. Mi funda es fea y me gusta más bien poco. Tiene unas llamas horrorosas y los colores no combinan. ¡Dios, qué fea es mi funda!
Esta mañana lunática he estado más bien poco sembrada. A pesar de que había quedado con Queta a las nueve y media para hacer papilla, no ha llegado hasta las diez, y servidora ha estado haciendo el paripé durante media hora en el laboratorio, aburridita, más bien. Después, mientras hacía las labores estaba espesita, pero sin mayor problema. A cosa de las tres y pico, polar en mano y con un pie fuera me he dado cuenta de que tenía que matar a los controles ¬¬
Cómo matar moscas sin prestar la más mínima atención. En la parra y sin mucho mirar he vaciado botella por botella en el cementerio. Y, lo que tiene no mirar, una de las botellas con papilla blandita ha escurrido, las moscas se han escapado (bien por ellas) y se me ha ido tanto la bola que se me ha caído el frasco-cementerio. Es algo estupendo como podréis imaginar, y además, para los no conocedores del tema, el éter huele regular. El éter con cadáveres de moscas huele horrible. Éter+cadáveres de moscas+papilla reblandecida tiene un matiz que ya sólo distinguimos los expertos. De manera aproximada, una persona normal diría sencillamente que huele a mierda. Así como si un nanobot se tirase un pedo a modo humo negro (sin drama, tranquilidad, lo sabemos, NO SON NANOBOTS)
Ensimismadita mientras limpiaba se me ha caído el otro cementerio. El de los novatillos. Por suerte éste estaba tan repletito de cadáveres que sólo se ha esparcido a modo salsa untosa y ha sido mucho más fácil de recoger.
Durante todo este tiempo lo único que he sido capaz de pensar es en la funda fea. Porque si mi funda fea hubiera estado puesta, el móvil no se hubiera empapado del mejunje y ahora no olería a lo que huele. No debería darle tanta importancia a las apariencias...
Fe de ratas (o erratas, como prefiráis): El cementerio no contiene éter, sino metanol. Por lo demás, el resto de la historia es verídica...






2 comentarios:
Para qué nos vamos a engañar: tu funda es peculiar, con colores que no pegan, y todo eso. Pero es tu funda, y debes quererla tal como es, con sus fallos y virtudes (mensaje subliminal). ¿Qué tienen las grandes superficies que hacen que lo feo parezca comprable? En cambio, en el Rastro, aunque las fundas sean bonitas, no las compras... ;)
Nota: todo esto no quiere decir que si huele mal, puedas tirarla. La higiene es lo primero, niños.
¡¡estoy indignadísima por tu comentario al respecto del Rastro!! ¬¬
Publicar un comentario